lunes, 30 de noviembre de 2009

Marley y yo.

Un perro no necesita autos caros, casas grandes o ropa exclusiva. Le basta con un palo empapado. A un perro no le importa si eres rico o pobre, inteligente o torpe, listo o tonto. Entrégale tu corazón y el te entregara el suyo. ¿Sobre cuantas personas puedes decir lo mismo? ¿Cuántas personas hacen que te sientas único, puro y especial? ¿Cuántas personas hacen que te sientas… extraordinario?

No hay comentarios: