X: No te puedo entender
G: Yo tampoco me puedo entender a mi misma, estoy rara, lo se. Igual sobre entender no sos el más indicado para hablar.
X: ¿Porque lo decís?
G: Porque realmente nunca pude entenderte. Siempre tan cambiante vos…
X: ¿Me estas reprochando algo?
G: Ni ahí, estoy siendo sincera, cosa que vos al parecer nunca fuiste.
X: ¿Por qué lo decís?
G: Porque siempre hubo dos versiones sobre todas las cosas que nos incluían a ambos. Yo solía contar todo sin detalles, por arriba, porque era todo tuyo y mío y no quería que pase a ser de todos; mientras que vos depende la persona cambiabas la versión.
X: Seguí con los reproches eh.
G: Y vos seguí sin entender, no son reproches, porque así y todo me entregue, pero bueno, nunca entendí porque hoy estamos acá, así.
X: Y volves a lo mismo.
G: Siempre vuelvo a lo mismo, te lo aviso para que no lo olvides y cuando quieras volver…
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario