martes, 7 de julio de 2009
Solían llamarla loca, como se suele catalogar a las personas que hacen cosas que están mas allá de lo que es considerado “normal”. Más de una vez la trataron de depresiva, y ni te cuento cuantas más de histérica. Podías verla con una sonrisa de oreja a oreja y en solo 1 minuto verla con su característica cara de orto. Mas allá de todo era una persona correcta, siempre decía las cosas bien (aunque mas de una vez se la había visto gritando fuera de sus casillas). Si un día te le acercabas a hablar podía responderte o simplemente ignorarte, todo dependiendo de su humor. Se la veía en pocas fiestas y siempre se daba por sobreentendido que estaba escuchando música en la casa y llorando por aquel que ya no estaba. Otra cosa que podía suceder era estar hablando con ella y que alguien diga algo que le recuerde a su ex y ella cambie la cara y te haga sentir la peor lacra del mundo. Lo peor que podía pasar era verla rebajarse para que él la vuelva a querer.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario